25 feb 2015

Posesión de la Islas Malvinas en nombre de las Provincias Unidas del Río de la Plata

David Jewett
En 1820, al iniciarse el período de las autonomías provinciales, el oficial de marina David Jewett tomó posesión de las Islas Malvinas en nombre de las Provincias Unidas del Río de la Plata en un acto público en Puerto Soledad, al que asistieron loberos y balleneros de varias nacionalidades, entre ellos estadounidenses y británicos, que recalaban en las Islas en el desarrollo de sus faenas.
El 6 de noviembre de 1820 Jewett izó por primera vez en las Islas la bandera de las Provincias Unidas del Río de la Plata. Arribó en octubre a Puerto Soledad, capital de las Islas Malvinas, donde encontró cazadores furtivos estadounidenses y británicos que carecían de autorización del gobierno de Buenos Aires. Advirtió a los navíos foqueros y pesqueros que sus actividades eran ilegales y que dañaban los recursos naturales locales.
Luego distribuyó entre los cazadores ilegales una circular bilingue que establecía lo siguiente:

"... tengo el honor de informarleque he llegado a este puesto comisionado por el Supremo Gobierno de las Provincias Unidas de Sud América para tomar posesión de las islas en nombre del país a que éstas pertenecen por la Ley Natural.
...Uno de los objetos de mi cometido es evitar la destrucción de las fuentes de recursos necesarios para los buques de paso."
La noticia fue publicada en medios de los Estados Unidos y del Reino Unido sin provocar comentarios oficiales por parte de esos países.
Focas en las Islas Malvinas

Durante la década de 1820 los distintos gobiernos de Buenos Aires designaron gobernadores en Malvinas y legislaron sobre sus recursos pesqueros y el otorgamiento de concesiones territoriales.
El general Matías de Irigoyen explicaba para esa época el abuso de la explotación pesquera cometido por los extrajeros:

Lobos Marinos en estas Islas argentinas
"Ellos concurren anualmente desde primeros de agosto hasta fines de enero, y sin tener la menor consideración al período de veda para reproducción, no solo matan para hacer sus cargamentos sino que destruyen a su partida para arruinar a los que aún quedan en faenas, y de este modo evitar la concurrencia en los mercados de venta. Los daños que resultan al país de esta conducta los prevé la razón más común y al no tomarse medidas sobre este proceder las bestias marinas y anfibias vendrán a concluirse..."
(Citado por Biedma, Juan josé: Crónica histórica del Río Negro de Patagones (1774-1834), Buenos Aires, Contes, 1905)

A partir de 1821, Martín Rodriguez, gobernador de Buenos Aires, decidió reglamentar la explotación pesquera en las costas patagónicas, estableciendo, en el artículo 2 de la ley del 22 de octubre de 1821, que los barcos extranjeros que procesaran la pesca en las costas debían pagar un derecho de seis pesos por cada tonelada. Más adelante, como los capitanes de los buques no aceptaban pagar derechos de pesca, por los decretos de enero de 1822 y octubre de 1829, se prohibió la pesca en las costas de la Patagonia.

Fuente: Malvinas en la Historia - Universidad Nacional de Lanús